martes, 4 de marzo de 2014

¿POR QUÉ NECESITAMOS LEER UNA HORA DIARIA?


¿POR QUÉ NECESITAMOS
LEER UNA HORA DIARIA?
-15 de marzo 1969-

©Giuseppe Isgró C.

La lectura amplia y variada representa el elemento fundamental para el desarrollo psíquico e intelectual del ser humano.
Las condiciones de la vida moderna sustraen al  hombre –y a la mujer- del desarrollo  activo de sus facultades mentales y con frecuencia descuida el recurso más asequible: la lectura, para sustituirlo por la televisión, la cual en exceso atrofia los órganos de ciertas facultades mentales. Esto tiende a aminorar la capacidad de iniciativa y hace al individuo más dependiente de los demás. También cabe destacar que, durante la etapa estudiantil , merma la capacidad de aprendizaje.
El ser humano necesita una activa reeducación personal. Precisa enfocar, periódicamente, su atención hacia aquellos elementos que son indispensables para el logro de una personalidad dinámica y para la perfección de los conocimientos que permiten su evolución en la naturaleza y una mayor comprensión de las leyes que les rigen.
Vivimos en un mundo donde estancarse significa quedarse rezagados. No conocernos a nosotros mismos y al mundo que nos rodea es faltar a lo más sublime de nuestra condición de seres pensantes. –“Conócete a ti mismo”, dijo Quilón, el Lacedemonio. El hombre –y la mujer-, en la búsqueda de ese conocimiento lucha durante toda su existencia. La lectura y la investigación son el medio indispensable para la satisfacción de la necesidad que representa un mayor desarrollo cultural o intelectual y una visión más amplia del ser humano en la naturaleza.
¿Qué hace la lectura? Lo veremos a continuación. El cerebro humano está formado por unas doce mil millones –o más- de células llamadas neuronas, las cuales forman las diferentes áreas o centros direccionales (psíquicos) del mismo. Estos centros constituyen el mecanismo de control  mediante el cual un ente llamado “psiquis” desempeña las funciones que nos caracterizan como seres pensantes y racionales. Al abordar el individuo los diferentes campos del saber humano, desarrolla activamente a estos centros o áreas psíquicas, cuyo desarrollo hace al ser humano más grande mentalmente, no tanto por los conocimientos adquiridos, sino por lo que el desarrollo en sí representa.
La lectura en sí representa para el cerebro lo que la gimnasia para el resto del organismo. La falta de ejercicio atrofia a los órganos y los degenera, perdiendo éstos capacidad para su funcionamiento normal. La manera de mantener activas y llenas de vitalidad a las neuronas cerebrales –y todo el aparato psico-mental- es mediante un período de lectura no menor de una hora diaria.
Esto contribuye, además, a la adquisición de una personalidad dinámica y definida.
Un axioma de Charles Darwin, dice: -“Toda necesidad crea el órgano y el hábito lo desarrolla”-. En el ser humano está latente la necesidad de una mayor preparación cultural y de un desarrollo activo y contínuo de su personalidad. El medio más asequible es la lectura. -¿Por qué no hacer que un período de lectura  de una hora diaria impulse nuestra naturaleza humana a un nivel más alto de perfección y evolución?.

Publicado en el Diario La Prensa, el Martes 26 de Agosto de 1969. Puerto La Cruz, Venezuela.
Del Libro: EL RETORNO A LA NATURA –Escritos de juventud-.
Este artículo, ampliado, se integró en el libro Cómo potenciar el Autodominio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario